Editada por el Ministerio, esta guía está destinada a todas las personas que, por su actividad profesional o su afición, estén en contacto con el campo: cazadores, pero también agentes forestales y de medio ambiente, agricultores y ganaderos, aficionados a las aves, micólogos, senderistas, y aficionados a la naturaleza en general.
Cuanto antes se detecte una enfermedad, mayores serán las oportunidades para su control. Los cazadores y demás usuarios del campo se preocupan por las especies cinegéticas, por la fauna no cinegética y por el medio natural.
Son, además, por su constante presencia en el campo y por sus conocimientos, los mejores vigilantes de la sanidad de la fauna silvestre. El objetivo de esta guía es asegurar la detección temprana de las principales enfermedades que afectan o pueden afectar a la fauna silvestre.
La vigilancia sanitaria y la comunicación inmediata de mortalidades o signos de enfermedad a los servicios veterinarios oficiales facilitan que se pongan en marcha las medidas de control y erradicación con la máxima rapidez posible.
Esto evita o disminuye el impacto negativo que muchas de estas enfermedades pueden tener en la caza, la sanidad animal, la salud pública y el medio ambiente.