Los hechos que juzga esta semana la Audiencia Provincia de Málaga, sucedieron durante el verano de 2017 cuando el acusado abusó presuntamente de su sobrina cuando esta tenía 12 años.
La sentencia de la Audiencia Provincial de Málaga determina también que el procesado presenta un grado de madurez psicológica próximo al que presenta la víctima.