Consejos útiles para ejecutar reformas integrales con éxito

Las reformas, para la mayoría de las personas, suele ser un dolor de cabeza, ya que además de invertir dinero, se invierte tiempo y dependiendo de la magnitud, pueden vivirse episodios de estrés y grandes quebraderos de cabeza. 

Cuando se trata de reformas integrales la ecuación se complica, porque muchas veces esto significa tener que desalojar el espacio, bien sea la vivienda entera, dejar de usar el baño, la cocina, un dormitorio, etc. Si se ha comprado una vivienda que requiere reformas integrales, la mudanza puede aplazarse por varias semanas, incluso meses. 

Todo este proceso es complicado, pero se puede aligerar mucha carga y lograr disfrutar de esta etapa de renovación si se elige a una buena empresa de reformas integrales de pisos en Madrid. Contar con una empresa de experiencia y de buena reputación en el sector es una de las mejores garantías para obtener los resultados esperados y que además, las obras se ejecuten en un ambiente armónico, profesional y bien organizado. 

Tanto el cliente como la empresa deben disponer de una buena planificación al momento de decidir llevar a cabo una reforma integral. Partiendo del ejemplo de que se trata de un piso recién adquirido que requiere reformas, la familia no podrá mudarse a este nuevo espacio sin que antes esté todo listo. 

Las mejores empresas del sector se encargan de todo, desde las modificaciones estructurales, si las hubiera, pasando por el reacondicionamiento de instalaciones eléctricas, de gas, agua, instalación de puertas, ventanas, revestimientos de techos y paredes, instalación de suelos, muebles, y hasta de aspectos decorativos. Estas ofrecen entregar un proyecto “llave en mano”, lo que quiere decir que solo tendrás que llegar con tus cosas personales y disfrutar del nuevo hogar. 

Reformas integrales de un piso habitado

Dependiendo de la magnitud de las reformas, posiblemente la opción más cómoda para los miembros de la familia sea desalojar el lugar de manera momentánea mientras se lleva a cabo la obra. Esto es especialmente conveniente cuando hay procesos de demolición de paredes y otras ejecuciones que generan mucho polvo y escombros. 

No obstante, una buena empresa con experiencia estará en la capacidad de ofrecer soluciones acordes con las necesidades y situación real de sus clientes y crear una planificación adaptada a las mismas. 

Partiendo de un ejemplo común y que tiene mucha demanda, encontramos las reformas integrales de baños y cocinas. Por lo general, los pisos familiares cuentan con dos baños, así que se puede usar uno de los baños mientras se interviene el otro y viceversa. Como se dijo, la planificación es crucial, así como cumplir con los tiempos de entrega, particularmente si la familia se encuentra habitando el espacio de intervención. 

Igualmente y, dependiendo de la complejidad de la obra, esta se puede ejecutar en tiempo record. Para ello, es fundamental contratar a empresas de reformas que ofrezcan multiservicios. Es decir, que cuenten con los profesionales versados en cada área para que se aboquen de una manera rápida y eficiente a culminar la reforma. 

También se puede coordinar la planificación de la reforma integral, de manera de ejecutarla por fases. Así, si se trata de acondicionar diversas áreas del hogar, los profesionales de la empresa organizarán los trabajos para que siempre haya un espacio para ser habitado sin contratiempos. 

No podemos mentir, una reforma si es compleja y no existe la opción de que los habitantes del hogar se muden por unos días a casa de los abuelos o buenos amigos, siempre habrá algunas molestias que soportar. Sin embargo, al poner la reforma en manos responsables y profesionales estas serán mínimas, se encargará de minimizarlas y de entregar una obra de calidad lo más pronto posible. 

Por otro lado, es importante tener en cuenta, no solo el desarrollo de una buena planificación, sino que además, dentro de la misma, deben estar bien establecidos los acuerdos previos que incluyan la calidad de los materiales a utilizar y un presupuesto detallado con una partida de recursos para imprevistos, para que no haya sorpresas ni retrasos.