Descubre cómo los bancos en España están enfrentando una subida en los costos de los depósitos según el Banco de España

Aumento del coste de los depósitos afecta a bancos españoles

El Banco de España ha emitido una advertencia a las entidades bancarias del país sobre el potencial impacto de los crecientes riesgos globales en sus operaciones. Entre estos riesgos se incluye el aumento de las tasas de interés a largo plazo, que podría incrementar los costes de los depósitos minoristas y provocar un alza en los préstamos dudosos. Los bancos españoles, que son principalmente minoristas, han disfrutado de un aumento en la rentabilidad de sus préstamos gracias a las tasas de interés en alza. Sin embargo, el informe semestral de estabilidad financiera del Banco de España indica que este escenario podría cambiar si las tasas de interés se mantienen altas durante un período prolongado.

Los depósitos minoristas y el margen de intereses

En comparación con otros bancos europeos, las entidades españolas ofrecen la remuneración de depósitos bancarios a un año más baja. En agosto, la remuneración promedio de los depósitos a un año era del 2,34%, en comparación con el 3% en el conjunto de la zona euro. En un entorno de menor demanda de crédito, el margen de intereses -la diferencia entre los mayores ingresos por créditos y los costes de los depósitos- podría deteriorarse en los próximos meses debido al aumento de los costes de los depósitos y a las menores exigencias de remuneración mínima del Banco Central Europeo.

Los desafíos futuros para los bancos españoles

Hasta ahora, los bancos españoles han logrado compensar el descenso de la cartera de nuevas hipotecas revalorizando sus préstamos existentes. Sin embargo, el Banco de España advierte que un aumento en las tasas de interés podría afectar las ventas de viviendas en los próximos trimestres y anticipa un deterioro en la calidad del crédito. Además, los préstamos dudosos, que actualmente están en mínimos históricos, podrían aumentar. En agosto, estos representaban el 3,56% de todo el crédito, muy por debajo del máximo histórico del 13,6% de finales de 2013. En este contexto, el Banco de España ha instado a los bancos a aplicar políticas prudentes de provisiones y planificación del capital y a utilizar los mayores beneficios para reforzar su resistencia.