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Descubre las interrogantes que Stephen Hawking dejó sin respuesta antes de partir

  • Stephen Hawking se definía como cosmólogo, viajero espacial y héroe.
  • Abordó cuatro preguntas trascendentales: ¿Dónde nacen el tiempo y el espacio? ¿Dónde mueren? ¿Es finito el universo? ¿Tiene futuro la humanidad en él?
  • Partió de la teoría de Einstein para sus descubrimientos.
  • Sus teoremas de singularidad y resultados sobre la termodinámica del espacio-tiempo le permitieron responder a cuestiones eternas.

Origen del universo según Hawking

Usando la teoría de Einstein, Hawking concluyó que nuestro universo tuvo un origen en el pasado, un principio. Los teoremas de singularidad de Hawking-Penrose establecen que el espacio-tiempo comenzó en una singularidad: la del Big Bang.

Se demuestra retrocediendo en el tiempo, empleando las ecuaciones de la teoría y las condiciones que se dieron en el universo primitivo, llegando a un punto donde el tiempo y el espacio desaparecen, marcando el origen del universo.

Final del espacio-tiempo en los agujeros negros

El espacio-tiempo alcanza su final en cada uno de los agujeros negros que se forman en el cosmos, según los teoremas de Hawking-Penrose. Estos agujeros negros son sumideros donde el tiempo y el espacio desaparecen para siempre.

Para Hawking, estos resultados solo podrían considerarse definitivos al combinar la Relatividad General de Einstein y la Física Cuántica, abriendo nuevas sendas en la física teórica.

Naturaleza finita pero ilimitada del universo

Hawking y Hartle concluyeron que nuestro universo sería finito pero ilimitado, sin una singularidad inicial. La forma en que se originó estaría determinada por las leyes de la Física, según la conjetura de Hartle-Hawking.

Este descubrimiento plantea una visión diferente sobre la naturaleza del universo y su origen, desafiando las concepciones previas sobre su eternidad e infinitud.

El futuro de la humanidad en el universo según Hawking

Hawking analizó los problemas que enfrenta la humanidad y señaló que podrían ser letales si no se resuelven en los próximos cien años. Sin embargo, se mostró optimista respecto a los avances de la inteligencia humana y artificial para encontrar soluciones.

Su consejo final a los jóvenes científicos fue mantener viva la sensación maravillosa de contemplar el universo, confiando en que los descubrimientos que nos legó seguirán generando nuevos conocimientos en el futuro.