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La asociación Lumière sur Patrimoine, dedicada a la protección del patrimonio en París, ha presentado una denuncia por hurto y encubrimiento de hurto en la comisaría de policía del Centro de París. Esta acción se basa en el sorprendente descubrimiento de la reventa de dos vidrieras que pertenecían a la catedral de Notre-Dame y que habían estado desaparecidas durante 161 años.
Según la asociación, estas dos vidrieras, datadas en el siglo XIII, fueron robadas en el siglo XIX mientras la catedral estaba siendo renovada. Curiosamente, las vidrieras reaparecieron en una subasta de Sotheby’s en junio de 2015, catalogadas como lotes 153 y 154. Aunque se estimaron en un rango de 40 mil a 60 mil euros cada una, finalmente se vendieron por cifras mucho más elevadas, 111 mil y 123 mil euros respectivamente.
La denuncia se presentó varios años después de la subasta, ya que la asociación afirmó no haber tenido conocimiento de la venta hasta más tarde. Sotheby’s, la casa de subastas involucrada, aclaró que la asociación nunca se había puesto en contacto con ellos antes de presentar la denuncia y se mostró dispuesta a colaborar con las autoridades en la investigación. Alegaron haber seguido todos los procedimientos legales, obtenido las autorizaciones necesarias y alertado a expertos y conservadores de museos sobre la subasta.
Sotheby’s, la famosa casa de subastas internacional, ha respondido a la denuncia presentada por la asociación Lumière sur Patrimoine, argumentando que las vidrieras en cuestión no fueron robadas, sino vendidas legalmente.
Según Sotheby’s, las vidrieras fueron desmanteladas en 1862 como parte de la restauración de Notre-Dame y vendidas posteriormente. Por lo tanto, alegan que no hubo robo y que obtuvieron todas las autorizaciones necesarias para la subasta de las vidrieras. Además, señalan que existen piezas similares de la catedral en la colección del Museo de Arte e Historia de Ginebra en Suiza.
La casa de subastas también afirmó que alertaron a expertos y conservadores de museos sobre la subasta y publicaron información detallada en el catálogo de la subasta. Aclararon que la asociación Lumière sur Patrimoine nunca se comunicó con ellos antes de presentar la denuncia y se mostraron dispuestos a colaborar con las autoridades en la investigación.
El caso de las vidrieras de Notre-Dame vendidas en la subasta de Sotheby’s plantea preguntas sobre su historia, sus propietarios y las medidas legales que rodean su venta y exportación. La asociación Lumière sur Patrimoine busca justicia y ha presentado la denuncia correspondiente, mientras que Sotheby’s defiende la legalidad de la venta.
La investigación policial iniciada a raíz de la denuncia intentará rastrear el camino seguido por las vidrieras desde su desaparición hace más de un siglo y medio. Los historiadores y expertos serán clave en este proceso, examinando la autenticidad y procedencia de las vidrieras.
Mientras tanto, el enigma en torno a estas vidrieras históricas de Notre-Dame continúa. La catedral, una joya de la arquitectura gótica y patrimonio nacional, ha sido testigo de numerosos desafíos a lo largo de su historia, incluyendo el devastador incendio de 2019. Ahora, el destino de estas vidrieras y su lugar en la historia de Notre-Dame están en juego, y solo el tiempo y la investigación podrán resolver este misterio.