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La sucesión de la Princesa de Asturias, Leonor, a su padre, Felipe VI, como jefa del Estado, depende en gran medida del Partido Socialista Obrero Español (PSOE). Este partido, que defendió la república como forma de Estado en 1978, ha establecido con el paso de los años un escudo político para la Corona.
Leonor jurará guardar y hacer guardar la Constitución de 1978, consciente de que su futuro como jefa de Estado depende en gran medida del PSOE. Sin los socialistas, su posición sería mucho más frágil. El PSOE ha optado por la lealtad al pacto constitucional, a pesar de su esencia republicana. Su apoyo ha sido clave para mantener la Corona frente a las presiones judiciales, políticas y sociales de los últimos años. Durante los gobiernos de Felipe González, se consolidó esta protección real y desde entonces el socialismo oficial nunca la ha cuestionado. Incluso Pedro Sánchez, a quien se atribuye un deseo de ruptura y que ha gobernado con un socio republicano y el apoyo parlamentario de independentistas catalanes y vascos, no se ha distanciado de este escudo. Si Leonor perdiera este apoyo, pasaría a ser una ciudadana más, ya que el soporte de PP y Vox no sería suficiente para mantener la institución.
El PSOE, a pesar de las críticas de la derecha sobre su supuesta intención de demoler el pacto constitucional, es el último dique de contención para Leonor y la monarquía. En 1978, estaban con la república. En 2023, están con la monarquía parlamentaria. A pesar de su preferencia republicana, el PSOE ha demostrado que su republicanismo es más retórico que práctico. Desde los trabajos que dieron forma a la Constitución, nunca ha vuelto a reivindicar la república, sino que ha defendido que alterar la piedra angular de la democracia podría demoler todos los cimientos de la convivencia. El PSOE ha tratado de desligar las conductas irregulares de las personas de las instituciones, y ha defendido que el actual monarca ha emprendido reformas en aras de la transparencia de la jefatura del Estado. A pesar de que estas reformas aún están lejos de los mínimos exigibles en una democracia, a los socialistas les sirven para defender el pacto constitucional de 1978. En conclusión, el PSOE ha logrado sortear la contradicción de declararse aún republicanos y posicionarse a favor de la Corona. Leonor puede estar segura de que cuenta con el apoyo del PSOE, un apoyo que esperamos que perdure muchos años.